El domingo pasado, mientras me perdía en el aroma de las empanadillas doradas saliendo de mi freidora de aire, recordé aquellas tardes en la cocina de mi abuela María. Sus manos expertas sellaban cada empanadilla con siete precisos golpes de tenedor —ni uno más, ni uno menos— una superstición culinaria que jura que trae buena suerte y evita que el relleno se escape durante la cocción. Esta receta tradicional española ha evolucionado con la tecnología, pero el sabor auténtico permanece intacto. ¿El secreto? La refrigeración del relleno antes de armar, un paso que muchos omiten pero que marca toda la diferencia.
📖 La historia detrás de las Empanadillas de Atún en Freidora de Aire
Las empanadillas tienen su origen en la cocina gallega del norte de España, donde tradicionalmente se preparaban con pescado fresco del día. Durante el siglo XX, cuando el atún en conserva se volvió un producto común, estas pequeñas delicias conquistaron todos los hogares españoles. Eran especialmente populares los viernes, cuando por tradición católica no se consumía carne.
Ahora, con la freidora de aire, podemos disfrutar de este manjar con mucho menos aceite pero conservando ese dorado característico que tanto nos recuerda a las cocinas tradicionales. Para quien disfruta de postres elaborados como la Tarta Tatin, que alcanza su punto perfecto después de 24 horas de reposo, apreciará que estas empanadillas se pueden preparar en apenas una hora y media, incluyendo el tiempo de refrigeración.
🧾 Ingredientes esenciales (12 empanadillas)
Para la masa:
• 500g de masa para empanadillas (o masa quebrada refrigerada)
• 1 huevo batido para pintar
Para el relleno:
• 150g de atún en conserva al natural, bien escurrido
• 150g de salsa de tomate casera (o tomate frito de calidad)
• 2 huevos duros, finamente picados
• ½ cebolla mediana, picada en brunoise fina
• 1 cucharadita de pimentón dulce
• 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
• Sal al gusto
📝 Instrucciones paso a paso
1. Prepara el sofrito base: Calienta el aceite en una sartén a fuego medio y sofríe la cebolla hasta que esté translúcida pero no dorada (unos 5 minutos).
2. Incorpora los sabores: Añade el pimentón, remueve rápidamente (10 segundos) para que libere sus aromas sin quemarse, e inmediatamente agrega la salsa de tomate.
3. Completa el relleno: Desmenuza el atún con un tenedor e incorpóralo a la sartén junto con los huevos picados. Cocina 3-4 minutos a fuego medio-bajo, ajusta de sal y retira del fuego.
4. Enfriamiento crítico: Transfiere el relleno a un recipiente ancho para que se enfríe más rápido. Cúbrelo con film plástico en contacto directo para evitar que forme costra y refrigera mínimo 1 hora.
5. Forma las empanadillas: Extiende la masa y corta círculos de 12cm de diámetro. Coloca una cucharada de relleno en el centro de cada disco.
6. Sella correctamente: Humedece ligeramente los bordes con agua, dobla la masa por la mitad y presiona con un tenedor para sellar, haciendo exactamente 7 presiones (el número de la suerte según mi abuela).
7. Preparación final: Pinta cada empanadilla con huevo batido para conseguir un dorado perfecto. Si te gustan brillantes como las tortitas americanas esponjosas cuyo brillo viene del suero de mantequilla, puedes añadir una pizca de azúcar al huevo.
8. Cocción en airfryer: Precalienta la freidora a 190°C durante 3 minutos. Dispón las empanadillas sin amontonarlas, rocía muy ligeramente con spray de aceite y cocina 10-12 minutos hasta que estén uniformemente doradas.
🤫 Técnicas secretas del chef
Nota del Chef: El secreto para unas empanadillas perfectas está en la temperatura del relleno. SIEMPRE debe estar frío al montar las empanadillas. En mis años de cocina profesional, he visto innumerables empanadillas «explotar» durante la cocción por omitir este paso. El relleno caliente genera vapor dentro de la masa, provocando que se abra por sus puntos más débiles.
Si no dispones de tiempo para refrigerar, un truco rápido es extender el relleno en una bandeja amplia y colocarlo en el congelador durante 15 minutos, removiendo ocasionalmente para enfriarlo uniformemente sin que llegue a congelarse.
Otra técnica que aprendí en Andalucía es complementar estas empanadillas con un refrescante gazpacho andaluz, que se prepara en apenas 15 minutos, creando un dúo perfecto para los calurosos días de verano.
🍽️ Consejos de presentación y servicio
Sirve estas empanadillas templadas (nunca hirviendo) para apreciar todos sus matices de sabor. Quedan maravillosas acompañadas de una ensalada verde sencilla o, si buscas algo más elaborado, con unas aceitunas aliñadas andaluzas que requieren 15 días de fermentación pero complementan perfectamente este plato tradicional.
Para un menú completo, finaliza con un flan cremoso casero de 4 ingredientes, otro clásico español que se prepara en 30 minutos pero que transporta instantáneamente a las sobremesas de nuestra infancia.
Las empanadillas de atún son parte del patrimonio culinario español, y adaptarlas a la freidora de aire representa esa maravillosa fusión entre tradición e innovación que caracteriza a la buena cocina. Recuerda que la gastronomía es un puente entre generaciones: cada vez que preparamos estas recetas ancestrales con métodos modernos, mantenemos viva la memoria de quienes nos precedieron mientras creamos nuevos recuerdos para quienes vendrán después. ¡Buen provecho! 🇪🇸